Buenas tardes blogger@s,
hoy os traemos una triste noticia que conocíamos desde hace semanas por mediación de Antonio Marín, secretario y portavoz de la asociación Cercle Obert de Benicalap.
Ha sido un cuarto de siglo de dura lucha por el patrimonio cultural valenciano y por otros tantos temas sociales. Una entidad pionera y a la vanguardia de la protección eficaz y real de nuestro vasto legado cultural no sólo en la ciudad de Valencia, sino a lo largo y ancho de la península. Y mientras otros tantos se han dedicado a hacer notas de prensa, denunciar de forma virtual y marear la perdiz para colgarse después unas medallas inmerecidas, Cercle Obert ha denunciado administrativa y judicialmente a l@s responsables de la desidia, abandono, destrucción y expolio de nuestro patrimonio. Muchos de los resultados positivos, de la adquisición de bienes y de la declaración de BICs en Valencia son mérito de Cercle Obert. Y aunque la prensa canalla otorgue con su silencio y niegue en muchas ocasiones la realidad, existe una enorme base de datos y documentos en la red que certifican el compromiso, la lucha y los resultados de esta asociación.
Desde nuestra entidad podríamos decir que hemos aprendido mucho de Cercle Obert, pero estaríamos faltando a la verdad. Lo hemos aprendido todo. Círculo por la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural no sería lo que es hoy en día y no habría conseguido los pequeños logros alcanzados durante estos últimos dos años sin la experiencia y las valiosísimas aportaciones del Sr. Antonio Marín. Hemos aprendido a pelear administrativa y judicialmente cuerpo a cuerpo con una administración negligente, incompetente e imprudente que usa el silencio, la desidia y el menosprecio como armas principales.
Por ello los miembros de nuestra entidad queremos decirte GRACIAS, MUCHAS GRACIAS Antonio, por estos dos años de amistad, aprendizaje, compromiso, colaboración y duro trabajo en pro de la defensa de aquello que más amamos, el patrimonio cultural valenciano.
Esperemos que el viento siga soplando a nuestro favor para seguir navegando por estos mares tan agitados...
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Cercle Obert se auto-disuelve la próxima semana, concretamente el 4 de julio.
El balance de todos estos años es altamente negativo, al constatar la falta de eco, resonancia y respeto por parte del conjunto de convecinos.
La entidad, en vista de la ignominiosa deriva totalitaria, advierte que entramos en un periodo histórico sumamente convulso y que nos afecta a todos muy negativamente.
Después de haber estado presente en numerosos conflictos de todo tipo en el último cuarto de siglo, la entidad cívica Cercle Obert no tiene otra opción que desaparecer oficialmente, en vista de la total ausencia de resonancia y respeto que demuestra el insolidario vecindario de Benicalap y otras organizaciones, que son simples sellos usados por partidos políticos y otros organismos.
Si algo ha caracterizado a Cercle Obert es su total independencia de las mafias. Nunca hemos sido correa de transmisión de ninguna organización o grupo empresarial. Nunca hemos aceptado instrucciones.
Nuestra entidad se va y se desintegra con la cabeza muy alta, después de haber logrado numerosos éxitos para nuestros desmemoriados y desagradecidos convecinos.
Hartos de que la mayor parte de colectivos simplemente sean simples correas de transmisión de mafias empresariales o de partidos políticos, tomamos la decisión de desintegrarnos oficialmente, haciendo oficial nuestra disolución a través de los cauces legalmente establecidos a tal efecto.
Lamentamos el papel que juegan muchos medios de comunicación ante la grave situación que padecen los sectores y colectivos más desfavorecidos por la crisis económica.
La amoralidad que reina en nuestra insolidaria e individualista sociedad, nos obliga a no participar en el circo, en el lamentable y bochornoso espectáculo que algunos farsantes y miserables están realizando en nuestro barrio de Benicalap, secundados por algunos medios de comunicación.
Pocas, poquísimas personas merecen nuestro agradecimiento, aunque nuestro trabajo y compromiso ha servido para conocer realmente el verdadero rostro de aquellos que se postulan como nuestros representantes y salvadores.
Después de tantos años de trabajo cívico, nos queda un sabor amargo y, constatar el alto grado de zafiedad, de ruindad y cobardía que impregna a la inmensa mayoría de nuestros convecinos, que todavía no se han ganado el titulo de ciudadanos ni de personas libres.
Buen viento y buena mar para aquellos pocos valientes que todavía resisten y luchan contra la barbarie, la ignorancia, la intolerancia, la estupidez, la cobardía...
Son las obras las que deben hablar por nosotros, no las palabras.
Cercle Obert de Benicalap
28 de junio de 2014
Antonio Marín Segovia
Secretario-Portavoz