Hola bloggeros,
ya estamos oficialmente en primavera. Y debe ser por este motivo que el puente de la Trinidad vuelve a tener retiradas las vallas que cerraban el acceso a sus escaleras reconstruidas. Volvemos a tener vía libre para usarlas.
Unas vallas que fueron colocadas para impedir el uso de unas flamantes y peligrosas escaleras que siguen a la espera del certificado de seguridad que permita su uso. Un certificado que lleva esperando 3 años y que por supuesto no va a llegar nunca porque se trata de una reconstrucción chapucera que no ha pasado ni pasará la normativa de seguridad. Otra obra más que reune lo mejor de la política patrimonial valenciana: absurda, innecesaria y como no, cara.
A la espera de que alguien se descalabre y de que denuncie al Ayuntamiento para reclamarle la correspondiente responsabilidad patrimonial por los posibles daños que se produzcan, os dejamos las imágenes que tomamos ayer tarde.
Saludos y cuidado con los escalones.
Puertas abiertas. Pasen, pero con cuidado...
En caso de caídas paga el Ayuntamiento, con el dinero de nuestros bolsillos.
Imágenes propiedad de Círculo por la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural.
Licencia Creative Commons 3.0
Cuando publiqué una entrada sobre este puente, me llamaron mucho la atención esas vallas, pues no sabia que carecían de permiso. Es curioso que las propias obras del ayuntamiento se retrasen en la obtención de sus propios permisos, sean seguridad, bomberos u otros.
ResponderEliminarVoy guardándome algunas fotografías de pequeños desperfectos y errores en la colocación de mobiliario que entorpecen la vision. El mantenimiento falla.
Hola Marcos,
ResponderEliminaren este caso no se trata de un retraso, ya que con la configración actual, no podrían obtener jamás el certificado que las habilite para se usadas. Son muy, pero que muy peligrosas. La irregularidad de los escalones antiguos, la altura y otros problemas provocarían seguramente caídas, con el correspondiente alud de denuncias al Ayuntamiento por los daños ocasionados.
Gracias por comentar.
Un saludo.