Buenas tardes,
Despedimos 2022 muy orgullosos de ser los guardianes de las piedras, en un año en el que las personas que formamos parte de nuestra asociación hemos tenido que luchar contra viento y marea para alcanzar algunos de los objetivos que nos propusimos a principios del presente año.
Un año muy intenso en el que hemos logrado que algunos de los bienes patrimoniales de nuestra ciudad pasen a estar catalogados como BRL, dentro del Catálogo de Espacio y Bienes Protegidos del Ayuntamiento de Valencia: la Quinta de Nuestra Señora de las Mercedes, el antiguo Faro del Puerto de Valencia, el Horno de Cal de la Cruz Cubierta o el Depósito de Agua del Puente de las Flores, además de otras peticiones y expedientes que todavía están en marcha.
Un 2022 en el que, finalmente y después de cinco años, hemos conseguido que el Ayuntamiento de Valencia le rinda el merecido homenaje al arquitecto valenciano Rafael Guastavino Moreno, colocando su escultura, obra de Alfredo Llorens, en la remodelada plaza de la Reina, muy cerca del lugar en el que nació. En este punto, reconocer el trabajo y el apoyo de Víctor M. Cantero Solís, @Tabaleter, Lluís de Manuel (Passejant València amb ulls curiosos) y el resto de amigos y amigas que nos han brindado su ayuda y apoyo,
Un año marcado también por la Lista Roja de Hispania Nostra, que ha crecido considerablemente, con la inclusión de diversas alquerías y barracas de la ciudad de Valencia, el muro histórico de las huertas del Monasterio de San Miguel de los Reyes, el Horno de Cal de la Cruz Cubierta, el grafiti histórico de la calle Bolsería nº35, o la Antigua estación del ferrocarril Xàtiva-Alcoi, entre otras. Una cuestión que pone de relevancia el abandono, la degradación y la falta de inspecciones en nuestro patrimonio cultural.
Este año será recordado, además de por la torpe y cutre manipulación de las cifras sobre intervenciones patrimoniales que nos han querido vender desde el Servicio de Patrimonio Histórico, por el significativo aumento de las pintadas y delitos contra el patrimonio, que suman más de 130, casi triplicando las de 2021. Unos números que dejan con el culo al aire a unas administraciones públicas valencianas que negaban la mayor, usando las "cifras oficiales" de la Policía Local para ocultar la realidad de un problema que va a más.
Este 2022 que estamos a punto de dejar atrás, vuelve a cerrar con infinidad de recomendaciones del Síndic de Greuges, numerosas denuncias y reaperturas de expedientes, silencios administrativos, respuestas incompletas, poca transparencia y participacion ciudadana real y afectiva, amén de salidas de tono, pataletas y bloqueos en RRSS de algunos regidores que ya han demostrado, sobradamente, su incapacidad y mediocridad para seguir ocupando un cargo público pagado por los contribuyentes. Personas así no pueden seguir al frente de un gobierno que se considera "progresista", del "canvi" i de la "gent".
E independientemente de los acólitos, palmeros, trolls, estómagos agradecidos y otros perritos falderos que han usado y usan las RRSS y la tribunas de algunos medios de comunicación escrito para intentar desprestigiarnos, nuestra asociación va a seguir con el trabajo que lleva desarrollando desde 2011-2012. Estos ataques y salidas de tono solo demuestran que vamos en la buena dirección.
Desde nuestra asociación deseamos que en 2023 tengamos una ciudad sin derribos ni destrucción de nuestro patrimonio cultural cinematográfico e industrial.
Os deseamos pues a todos un muy ¡Feliz Año Nuevo! ¡Salvem el Metropol y la naves de la calle Guala!