Buenos días,
continuando con el entorno del Monasterio de San Miguel de los Reyes (BIC) y justo al otro lado de la Avenida de los Hermanos Machados (Ronda Norte), se encuentran las alquerías de Albors o de San Lorenzo y el Molí de Sant Miquel (BRL).
En nuestro blog hemos escrito numerosas entradas al respecto, después de que en febrero del año 2015 denunciáramos por primera vez el estado de degradación y ruina de las mismas, advirtiendo la presencia de una peligrosa grieta en una de las edificaciones que finalmente hizo que se viniera parcialmente abajo a pesar de las recomendaciones del Síndic de Greuges y las advertencias a través de todos los medios posibles:
A punto de llegar al 2020, el estado del entorno de las alquerías no solo no ha mejorado, sino que ha empeorado en los últimos cinco años. La presencia de pintadas y grafitis se ha extendido y se repite continuamente en las alquerías y edificaciones de titularidad pública; se ha abierto un nuevo butrón en una de las construcciones, convirtiéndola en un almacén de trastos y basura; uno de los recodos de la parte posterior sirve de depósito y vertederos de escombros y todo tipo de enseres; la alquería que se vino parcialmente abajo sigue apuntalada y sin reconstruir casi dos años y medio después; y la zona posterior y lateral es un auténtico barrizal además de un aparcamiento indiscriminado de vehículos.
El Ayuntamiento de Valencia, independientemente del color político del partido de turno que gobierne, sigue sin cumplir con sus obligaciones legales, enredándose en su propia burocracia e incompetencia, dilatando la solución de los expedientes eternamente y demostrando una incapacidad manifiesta y crónica de resolver los numerosos problemas patrimoniales que sigue teniendo nuestra ciudad. Los años y las legislaturas pasan y se sigue actuando a salto de mata, sin un plan claro y definido. Solo a base de denuncias y de decenas de recomendaciones del Síndic.
Un saludo...
