Hola blogger@s,
primero de todo queremos darle las gracias a nuestro buen amigo Javier Luna por avisarnos del desplome en la vía pública de varias de las tejas de reflejo metálico que recubren los cupulines de la fachada principal de la fábrica de La Ceramo, recayente a la Avda. de Burjassot nº 142. Sin personas como él, gran amante y defensor de nuestro patrimonio, sería imposible llevar a cabo nuestra labor de defensa y difusión de nuestro legado cultural. Gracias a su aviso pudimos denunciar y solucionar este grave problema que podía haber causado un serio disgusto debido al gran número de personas que pasan a diario por debajo de la fachada de esta joya de nuestro patrimonio.
En segundo lugar, agradecer igualmente a Carlos Garsán, periodista de Cultur Plaza, por dar cobertura de forma brillante a esta noticia y por la publicación de sendos artículos que han permitido visibilizar notoriamente el problema de La Ceramo.
Un problema que dura ya demasiado tiempo y que nos ha obligado a reabrir el expediente con el Síndic de Greuges. Trámite administrativo que arranca en junio de 2013 y que ya lleva 4 recomendaciones, 2 sobre la fábrica y 2 sobre la obtención de copias documentales completas de los informes de Bomberos y Policía. Aún así y a pesar de haber conseguido que se realizaran una serie de medidas precautorias, que se llevaron a cabo en abril del presente año, se ha demostrado que las mismas han sido insuficientes, incompletas y un mero parche para cumplir con el expediente. Una chapuza si se tiene en cuenta que sólo se ha intervenido sobre el 20% del inmueble y que han continuado los desprendimientos y ha habido caída de material cerámico de la fachada principal.
Nos resulta cuanto menos sorprendente que, a pesar de las denuncias y del más que evidente estado de los cupulines, no se haya inspeccionado antes su estado, no se hayan consolidado elementos susceptibles de desprenderse de la vía pública, no se haya colocado antes una tela protectora, etc. Una evidente muestra de despreocupación y desinterés por recuperar y rehabilitar este BRL, joya de nuestro patrimonio industrial.
Ha tenido que ser ahora, y sólo tras una llamada al 112 para que se personara el cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Valencia, cuando se ha procedido a retirar las tejas de reflejo metálico que estaban medio sueltas y se han visto obligados a colocar una tela metálica para evitar males mayores. En este punto cabe recordar que en agosto de 2013 ya hubo un desplome importante en el que los bomberos tuvieron que intervenir y, sin embargo, se optó por no proteger ningún elemento con la tela metálica.
Resulta pues lamentable que las administraciones públicas vayan siempre tantos pasos por detrás de la realidad y las necesidades de nuestro patrimonio cultural. ¿Hasta cuándo seguiremos consintiendo esta actitud tan infame por parte de unas instituciones que están para atender nuestras necesidades?
Un saludo y gracias de nuevo a las personas que hacen posible que el Gran Hermano del Patrimonio tenga ojos en todas partes para defender y salvaguardar aquello que más amamos, nuestro patrimonio.
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