Buenos días,
Cerramos 2023 como el año del "cambio", entre comillas, y de los récords negativos.
Año de "cambios" en el gobierno municipal y autonómico que siguen sin materializarse en la protección, cuidado y rehabilitación de nuestro patrimonio cultural, así como tampoco en materia de transparencia y del crónico silencio administrativo que se nos sigue aplicando. La vía administrativa sigue bloqueada y nos obliga a acudir al Síndic de Greuges en casi todas las denuncias que presentamos por RGE. Desde 2011-2012 no ha cambiado prácticamente nada y no vemos ninguna intención de cambiar, por parte de las administraciones públicas valencianas.
Lo más destacado de este año que termina ha sido el aluvión de bienes patrimoniales que han entrado a formar parte de la Lista Roja del Patrimonio de Hispania Nostra, cuestión que a más de uno parece haberle molestado y bastante.
Durante 2023 hemos alcanzado la vergonzosa cifra de veintidós bienes con su ficha individual, más uno genérico. Un total de veintitrés elementos patrimoniales que han convertido a Valencia en la ciudad con más bienes inscritos en esta lista de toda España. Un récord del que no podemos sentirnos, para nada, orgullosos. Capítulo aparte, habría que mencionar también a la ciudad de Xàtiva, que va ya por once.
Estos son los bienes de Valencia incluidos actualmente en dicha lista:
1. Cine Metropol.
2. Alquería de Ponsa.
3. Antigua Estación FEVE de Nazaret.
4. Quinta de Nuestra Señora de las Mercedes (Casino del Americano).
5. Grafiti histórico barco de la calle Bolsería.
6. Antiguo horno de cal en la Cruz Cubierta
7. Antigua sede del Teatro Escalante.
8. Edificio Santiago Rusinyol del conjunto de la Alquería de San Llorenç.
9. Tapia de la huerta del Monasterio de San Miguel de los Reyes.
10. Alquería del Rey.
11. Alquería de Tallarrós.
12. Alquería de Falcó.
13. Moli dels Frares.
14. Lienzos y torre de la muralla islámica de la calle Salinas nº5 y nº17.
15. Alquería de Serra.
16. Campana Jaume de la Catedral de Valencia.
17. Caballerizas del Palacio de Escrivá.
18. Fábrica de la Ceramo de Benicalap.
19. Barrio del Cabanyal.
20. Alquería dels Moros (edificaciones de titularidad privada).
21. Alquería de la Torre.
22. Alquería de Burgos.
23. Alquerías valencianas (categoría genérica).
Otro punto a destacar son las asignaturas pendientes, que se arrastran de legislatura en legislatura. Bienes patrimoniales que llevan lustros, e incluso décadas, esperando una intervención que nunca llega. En muchos de estos casos, su expedientes son del año 2012-2013 y durante estas dos últimas legislaturas, en las que se nos prometió el oro y el oro, apenas se ha avanzado.
Edificios como La Ceramo, las alquerías de la Torre, Falcó, Serra, San Llorenç o la de Olba, el muro de la huertas históricas del Monasterio de San Miguel de los Reyes, el Casino del Americano, la Estación del Grao o la muralla y el torreón andalusí de la calle Salinas nº5 y nº17, los puentes históricos y los pretiles, entre otros muchos, siguen tal y como lo estaban en 2015 y antes de ese año.
Más allá de las obras precautorias, apuntalamiento, la colocación de una malla protectora, pintar y repintar la fachada, o decir que han licitado y que están en proceso de adjudicar el proyecto definitivo (que nunca que llega, por a o por b), no ha habido nada más. La moda, o más bien excusa, que hemos estado escuchando durante los últimos años puede resumirse en que "se ha licitado el estudio para redactar el proyecto con el que se aprobarán las bases para redactar así la licitación del proyecto de intervención básica en el bien". Una forma de marear y de tomar el pelo a los vecinos, girando como una peonza durante años, en bucle.
Lamentablemente, se nos sigue vendiendo humo y dilatando los plazos de manera irresponsable, imprudente y negligente. Si durante el 2024 la dinámica sigue siendo la misma, no sólo aumentarán los bienes de la Lista Roja, sino que por primera vez en nuestra ciudad, tendremos bienes en la Lista Negra, a mayor vergüenza nacional e internacional.
Un saludo... y ¡Feliz 2024!