Buenos días bloggeros,
ha pasado más de un mes y el muro histórico que rodea la huerta del Monasterio de San Miguel de los Reyes (actual Biblioteca Nacional Valenciana) sigue tirado en el suelo. Los restos de este muro permanecen esparcidos por una acera por la que pasan a diario decenas de personas. Un fiel reflejo de la realidad de nuestro patrimonio y de la administración encargada de custodiarlo, protegerlo y ponerlo en valor.
En todo este tiempo ni la Conselleria de Cultura ni el Ayuntamiento de Valencia se han preocupado por recogerlos y ponerlos a buen recaudo para su posterior reconstrucción. Han pasado olímpicamente de este asunto, como viene siendo la tónica general.
Y todo ello a pesar de que la Dirección General de Cultura (antigua de Patrimonio) tiene su sede en el mismo monasterio, desde donde podrán observar todos los días el lamentable estado de este muro.
Las palabras pueden mentir, pero las imágenes y los hechos hablan por si solos. Por todo ello puede verse claramente cual es la política cultural real de la administración pública valenciana. Ninguna.
Un saludo...
Entorno de protección de un bien declarado BIC
Aparcamiento BIC, que no VIP
El muro por los suelos, con la huerta al fondo y el Monasterio a la derecha
El estado y la integridad del muro son lamentables
Estado del muro por la parte posterior
Escombros BIC
La verdadera imagen de nuestra política cultural
(Imágenes propiedad de Círculo por la Defensa y Difusión del Patrimonio Cultural. Licencia Creative Commons 3.0)